El índice de precios de los alimentos de la FAO se mantiene estable en marzo

La subida de las cotizaciones de los aceites vegetales compensa la bajada de los precios del trigo, el maíz, el arroz y el azúcar

©FAO/Stuart Tibaweswa

04/04/2025

Roma - La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) informó el viernes de que el índice de precios de los alimentos de la FAO, un indicador de referencia de la evolución de los precios mundiales de los productos alimenticios, se había mantenido prácticamente invariado en marzo respecto de su valor revisado de febrero, ya que el descenso de las cotizaciones mundiales de los cereales y el azúcar había compensado el notable aumento de los precios de los aceites vegetales.

El índice, que hace un seguimiento mensual de los precios internacionales de un conjunto de productos alimenticios comercializados a escala mundial, registró un promedio de 127,1 puntos en marzo, es decir, un 6,9 % por encima del nivel de hace un año, pero se mantuvo un 20,7 % por debajo del nivel máximo alcanzado en marzo de 2022.

El índice de precios de los cereales de la FAO disminuyó un 2,6 % en marzo, ubicándose un 1,1 % por debajo del nivel de marzo de 2024. Los precios mundiales del trigo cayeron al disminuir la preocupación por las condiciones de cultivo en algunos de los principales países exportadores del hemisferio norte, aunque las fluctuaciones cambiarias atenuaron el descenso. Los precios mundiales del maíz también descendieron desde febrero, al igual que los del sorgo. El índice de precios de la FAO para todos los tipos de arroz disminuyó un 1,7 % ante la débil demanda de importaciones y la abundancia de suministros exportables.

Por el contrario, el índice de precios de los aceites vegetales de la FAO aumentó un 3,7 % desde febrero, ubicándose en promedio un 23,9 % por encima del nivel alcanzado el año anterior. Subieron las cotizaciones de los aceites de palma, soja, colza y girasol, impulsadas por la gran demanda mundial de importaciones.

También subió el índice de precios de la carne de la FAO, un 0,9 % en el mes y un 2,7 % en el año, debido sobre todo al aumento de los precios de la carne de cerdo en Europa después de que Alemania recuperara la condición de zona libre de la enfermedad de fiebre aftosa y al fortalecimiento del euro respecto del dólar de los EE.UU. Los precios mundiales de la carne de aves de corral se mantuvieron prácticamente estables en marzo, pese a las constantes dificultades ocasionadas por los brotes generalizados de gripe aviar en algunos de los principales países productores.

El índice de precios de los productos lácteos de la FAO se mantuvo invariado desde febrero, al verse compensada la bajada de los precios internacionales del queso por la subida de las cotizaciones de la mantequilla y las leches en polvo.

El índice de precios del azúcar de la FAO cayó un 1,4 % en marzo, impulsado principalmente por indicios de debilitamiento de la demanda mundial. Las precipitaciones que se produjeron recientemente en las principales zonas productoras de caña de azúcar del sur del Brasil contribuyeron aún más al descenso, mientras que el deterioro de las perspectivas sobre la producción en la India y la persistente preocupación por las perspectivas generales del cultivo en el Brasil limitaron el descenso de los precios.

Puede obtenerse más información aquí.

Pronósticos actualizados sobre la oferta y la demanda de cereales

La FAO también publicó el viernes una nueva Nota informativa sobre la oferta y la demanda de cereales, con estimaciones revisadas para 2024 y nuevas perspectivas sobre los cultivos y las cosechas en 2025.

La estimación sobre la producción mundial de cereales en 2024 se cifró en 2 849 millones de toneladas, lo que, si bien representa una caída interanual del 0,3 %, supera a las estimaciones anteriores debido a una producción en Australia y Kazajstán más abundante de lo que se había previsto anteriormente. El pronóstico de la FAO sobre la producción mundial de arroz en 2024/25 apenas ha variado, situándose en 543,3 millones de toneladas, lo que supone un incremento anual del 1,6 %, debido sobre todo a la ampliación de la superficie sembrada.

El pronóstico de la FAO sobre la producción mundial de trigo en 2025 se mantiene invariado desde el mes pasado, en 795 millones de toneladas, al mismo nivel de la estimación revisada para 2024. Se prevé que la producción de trigo en la Unión Europea aumentará un 12 %, tras los descensos provocados por las condiciones atmosféricas en 2024, y también es probable que aumente en la Argentina, Egipto y la India, mientras que disminuirá en Australia, los Estados Unidos de América y en algunas zonas de los países asiáticos del Cercano Oriente. Se calcula que variarán las cosechas de maíz en el hemisferio sur, previéndose aumentos en el Brasil y Sudáfrica, pero un descenso en la Argentina.

El nuevo pronóstico de la FAO acerca de la utilización mundial de cereales en 2024/25 asciende a 2 868 millones de toneladas, lo que representa un incremento del 0,9 % respecto del nivel de 2023/24, liderado principalmente por el nuevo nivel sin precedentes alcanzado por la utilización de arroz.

Se estima que las reservas mundiales de cereales disminuirán en un 1,5 % y se ubicarán en 873,3 millones de toneladas al cierre de las campañas que finalizan en 2025, principalmente como consecuencia de la contracción significativa prevista para las reservas de cereales secundarios. Por el contrario, se prevé un aumento de las existencias mundiales de trigo y arroz. Los pronósticos actualizados ubican la relación entre las reservas mundiales de cereales y su utilización en 2024/25 en el 30,1 %, un porcentaje ligeramente inferior al del año anterior, aunque seguirían indicando un nivel relativamente holgado, según la FAO.

La FAO ha rebajado aún más, en 5,3 millones de toneladas, su pronóstico sobre el comercio mundial de cereales en 2024/25, que ahora asciende a 478,9 millones de toneladas, lo que constituye una contracción del 6,7 % respecto de 2023/24 y el nivel más bajo desde 2019/2020. La disminución prevista de las compras por parte de China es uno de los principales factores que explican la rebaja del pronóstico relativo al comercio de cereales secundarios y trigo.

Puede obtenerse más información aquí.

También el Sistema de información sobre el mercado agrícola (SIMA), que alberga la FAO, publicó el viernes su boletín mensual sobre el mercado, Market Monitor. Además del análisis periódico de mercado, en el artículo de fondo del informe se hace un llamamiento al diálogo sobre el comercio de productos alimenticios para salvaguardar la seguridad alimentaria mundial y se señala que el arancel promedio aplicado a los productos agrícolas se redujo en más de la mitad entre 2005 y 2022.

Contactos

Christopher Emsden Oficina de Prensa, FAO (+39) 06 570 53291 [email protected]

Oficina de Prensa, FAO (+39) 06 570 53625 [email protected]